Mi aparente abstracción del mundo solo era que la relación era tan cercana que dolía. Tanta conexión con el mundo y empatia con su todo me estaba haciendo apática a sus partes, como si el individuo fuera solo un títere irrelevante, donde sus decisiones no influyen ni cambian nada aunque sean acciones que busquen eso. Todo programado, hasta lo aparentemente más divergente en realidad es necesario que se de en pro del todo. Todo con una intencionalidad trascendente tan cercana que aplasta, tan cercana que es imposible de ver, tan evidente que se nos escapa. Una intencionalidad que nos mueve a participar del todo aunque justo lo que queramos hacer sea todo lo contrario.
3 comments:
Y yo estuve ahi...en la avant premiere de este escrito! Te extraño!
Recuerdo haber escrito una vez, hace varios milenios atrás, que todos somos parte de un todo inexpugnable y que sólo de esta forma progresamos realmente... Mi pensamiento no ha cambiado del todo, pero sí ya no soy tan absoluto, hace tiempo dejé de serlo. Creo que si bien somos un todo, ese todo está compuesto por nuestras individualidades... y eso es lo que hace magnífico al todo, no el todo en sí mismo... creo qe es algo complejo...jejeje.
En fin, tu individualidad es lo unico que nadie nunca puede quitarte... por más que lo intenten, tú eres tú... así de simple...
Un abrazo, niña...
Nos vemos.
Genial !! muy bueno lo que escribís !!
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